Jerarquía, heridas abiertas y tortugas sueltas
El mercado fue bueno: llegaron refuerzos de jerarquía y Autuori ha reconstruido un equipo competitivo. Pero el caso Pedro Aquino dejó una herida innecesaria. No era cuestión de ficharlo, sino de respeto y conducción. Mientras el equipo crece, el club aún expone a los suyos. A Uribe se le escapan las tortugas.